La naturaleza sísmica de la cuenca del Pacífico de Nicaragua y la profusión de fallas sísmicas, especialmente en el área de Managua entre el volcán Tiscapa y el lago Xolotlán, y al sur de la laguna, son una amenaza permanente en la que pueden ocurrir terremotos en cualquier día a cualquier hora.
No solamente en Managua, sino en cualquier parte cerca de las costas del Océano Pacífico donde pasa el Cinturón de Fuego y el choque de las placas tectónicas Coco y Caribe que también afectan a toda Centroamérica. Los desastres y tragedias causados por los terremotos en Nicaragua se deben a las pésimas construcciones.