IMPORTANTE EXPOSICIÓN DEL DR. MANUEL MADRIZ EN SU LIBRO
El potencial del río San Juan de Nicaragua como Vía Internacional de Comercio es un recurso de suma importancia económica y social que se ha desperdiciado por siglos. Desde tiempos precolombinos ha sido clara la importancia del río San Juan como ruta comercial, pero lastimosamente las aguas preciosas y el valioso curso del río se desperdicia usándose solamente como transporte local y turismo interno. La Vía Internacional de Comercio del río San Juan no tiene nada que ver con los proyectos de canalización interoceánica, sino con utilizar la ruta acuática del río San Juan, tal como la naturaleza se lo dió a Nicaragua y usar esa ruta como Vía de Comercio Internacional.
Todo está expuesto en el libro «La necesaria apertura de la vía de comercio del río San Juan de Nicaragua», una obra de solamente 167 páginas, incluyendo los históricos anexos documentales, obra escrita por el Dr. Manuel Madriz Fornos, miembro de número de la Academia de Geografía e Historia de Nicaragua, AGHN, considerado el máximo especialista en el río San Juan de Nicaragua, su uso y los conflictos de Nicaragua con Costa Rica e Inglaterra.
El Dr. Madriz expone en su libro que la Vía de Comercio del Río San Juan de Nicaragua facilitará el transporte de por ejemplo contenedores desde Guatemala y El Salvador hasta Panamá y otros destinos y viceversa, incorporando una nueva ruta de tránsito intracomunitario de mercancías, derivando cuantiosos beneficios para la región centroamericana, incluso propiciando el acercamiento, cooperación y comercio entre las islas del Caribe y Centroamérica, promoviendo el comercio y el desarrollo económico entre estos países, pero especialmente para Nicaragua. Y no existe ningún obstáculo legal para que Nicaragua habilite la navegación en todo el curso del río San Juan de Nicaragua, incluyendo dragado y dinamitación de obstáculos, como los Rápidos de El Castillo, desde su inicio frente al puerto de San Carlos cuando nace saliendo del lago Cocibolca, hasta su desembocadura en San Juan de Nicaragua, antiguo San Juan del Norte, que muchos renegados, por ignorancia, llaman Greytown, invento de los ingleses, no saben que ellos lo llamaron con ese nombre en homenaje al entonces gobernador de Jamaica Sir Charles Grey, pero muchos nicas son serviles.
El libro del Dr. Madriz Fornos es un estudio detallado del Tratado Jerez-Cañas, y las interpretaciones del Laudo Cleveland sobre el contenido del Tratado-Jerez-Cañas con Costa Rica y los Laudos Alexander sobre la interpretación y aplicación práctica.
Por el Tratado Jerez-Cañas Nicaragua tiene el derecho de establecer la Vía de Comercio Internacional por el río San Juan para el ingreso y la salida de embarcaciones de comercio y de uso general desde y hacia el Mar Caribe. como lo señala el Laudo Alexander de manera categórica: «En todo el Tratado el río San Juan es tenido y reputado como una vía de Comercio».
Las partes que componen la Vía de Comercio como las describe el Laudo Alexander, son: 1) El río San Juan propiamente. 2) La bahía de San Juan del Norte, y 3) El puerto en su salida, que para el caso, la baía forma dos puerto: el Puerto de San Juan del Norte, que fue ocupado por los ingleses denominado por ellos como Greytown y el Puerto de Puntarenas, del que se habla poco, pero era el puerto que utilizaba la Compañía Accesoria del Tránsito del comodoro Cornelius Vanderbilt para transportar pasajeros desde Nueva York a San Francisco de California, atravesando la Vía de Comercio Internacional del río San Juan, incluyendo la navegación en parte del lago Cocibolca.
El río San Juan propio, sin los brazos Colorado y Taura, es la parte más extensa de la Vía de Comercio. En la actualidad el río es navegable hasta el surgimiento del Colorado, que se lleva el 90% de las aguas, afectando la navegabilidad del río San Juan propio hacia su desembocadura e imposibilitando la formación de la bahía de San Juan del Norte, por las obras realizadas por Costa Rica que hizo dragados en la parte media y baja del Colorado, usando las aguas para agricultura y usos conexos.
El elemento fundamental para la apertura de la Vía del Comercio del río San Juan es el incremento del volumen de aguas hacia la bahía de San Juan del Norte, y Nicaragua tiene todas las herramientos y todo el derecho por «el exclusivo dominio, señorío y sumo imperio sobre todas las aguas del río San Juan, sin interrupción hasta la salida al mar Caribe». Por tanto Nicaragua puede usar su pleno derecho para realizar todas las obras de ingeniería para hacer navegable toda su Vía de Comercio.